Experimentos caseros para niños en tiempos de cuarentena
Ante la actual crisis producida por la pandemia del Covid-19, un peligroso virus que hasta el momento no tiene vacuna, las medidas de prevención y el distanciamiento social son las mejores opciones, sin embargo, estar confinado en el hogar a veces es una situación difícil de llevar para los más pequeños, por ello, existen diversos experimentos caseros que los niños pueden hacer en tiempos de cuarentena.
Algunos experimentos caseros y sencillos para los niños
Los experimentos caseros para los niños durante la cuarentena, se pueden realizar con elementos de uso diario, por lo que, además de ser divertidos, también son una alternativa económica de entretenimiento.
Por ejemplo, con una botella de plástico transparente, agua, alcohol de 90°, plastilina, una pajilla, un tapón y colorante, podemos crear un termómetro básico.
Solo necesitamos llenar el envase por la mitad, con la misma cantidad tanto de agua, como de alcohol y agregarle el colorante.
A la tapa del recipiente, se le debe abrir un agujero en el centro utilizando unas tijeras para pasar la pajilla hasta sumergir la punta.
Preferiblemente, se debe usar un envase de tapón de rosca y sellar, además, los bordes del hoyo donde pasamos la pajilla, con la plastilina.
De esta manera, al poner el recipiente sobre otros con agua fría o caliente, subirá el líquido por el pequeño tubo dependiendo de la temperatura.
¿Y para los más pequeños? Otra alternativa divertida de ciencia en casa
Si en tú caso cuentas con niños muy pequeños, necesitarás un experimento más sencillo, como el del “cohete loco”.
En este sentido, tus instrumentos serán un globo, una pajilla, hilo y cinta adhesiva. El primer paso es pasar el hilo por la pajilla.
Cuando termines, ata las puntas del hilo a objetos dispuestos en extremos opuestos del mismo cuarto, infla el globo y evita que escape el aire.
Sin soltar el pico del globo, adhiérelo por uno de sus costados a la pajilla utilizando la cinta adhesiva y posteriormente, suéltalo para verlo viajar.
Pese a ser muy simple, a los más pequeños les encanta, pero los padres de los niños deben estar con ellos al hacer los experimentos.